A por otro asalto.

Definitivamente esto no es normal!!

Que cada noche que pasamos juntos tenga como consecuencia una semana completa de recuperación entre las agujetas, los moratones y el escozor de mis partes nobles no es lo que se dice habitual, al menos no con otras parejas sexuales que había tenido hasta el momento.

Siempre llego a mi casa demasiado cansada para pensar. Me meto en la cama y duermo hasta la mañana siguiente sin pedirme más explicaciones.

Pero al despertarme y sentir el dolor en todas las partes de mi cuerpo me pregunto porqué sigo con esto.

Al ver en el espejo tus manos dibujadas en un suave tono morado sobre mis nalgas, las marcas de tus dedos en mis caderas, me repito que no debe volver a repetirse, que no debe ser sano.

Al igual que no debe ser sano que al pasar mis dedos por la marca de tus dientes en mi hombro me recorra un escalofrío que me hace temblar las rodillas y palpitar mi sexo.

Y entonces me doy cuenta que quizá no sea normal, que quizá no sea sano, pero me hace sentir cosas que no creí que existieran.

Así que cuando mi cuerpo se recupere volveré a marcar la cita para un nuevo asalto que me recuerde de nuevo que estoy viva.

Nashaimm.

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