De pronto me faltas

Así, sin más, de pronto me faltas.
Siempre es por sorpresa, sin avisar.
Durante años estás, no estás, te sumo y te resto de mi vida y todo está bien.
Pero de pronto un día me faltas.
No estás, no te encuentro y no te siento. Necesito tu voz y no la escucho, necesito tu abrazo y no lo alcanzo. Simple, me faltas.
Y no tiene sentido porque nunca has estado. Y no tiene lógica porque no te necesito, pero me faltas y con esa falta me falta el aire y un peso me oprime el pecho y me hago pequeña y pierdo mi fuerza y me lloran los ojos y se entrecorta mi voz y me siento sola, muy sola y vacía. Y no quiero sentir nada que no sean tus manos y me molesta el aire que me rodea.
Pero pronto se pasa, como siempre, y sigo sumandote y restandote a mi ecuación sin que modifiques el resultado.
Y todo continúa y sigo sonriendo y sin miedo, feliz y contenta hasta la siguiente vez que me faltas y mi mundo se derrumba.
Paz.

Si lo has disfrutado comparte.

Comentarios

Entradas populares