Buenos días.

Buenos y fríos días de esta mañana de otoño.

Hoy me he levantado con una sonrisa, signo inequívoco de que la tormenta ha pasado, al menos por el momento.

El día de hoy me ha regalado unos minutos de mi fenómeno meteorológico favorito, y es que hoy el día despertó con niebla!!!!

Se acabo la astenia, se acabo la tristeza. Bienvenido otoño y tu hermano el invierno que me llenáis de alegría con vuestras noches heladas y mañanas brillantes, y que de vez en cuando me regaláis días grises y ciegos, de esos que me transportan a mi tierra natal.

Después de varias semanas despidiéndome del verano y su luz, intentando aclimatarme de nuevo a la oscuridad y al frio y sobreponerme a los acontecimientos que han hecho que este cambio se convirtiera en una tarea ardua y casi dolorosa la niebla de hoy me ha dado la clave para cambiar el punto de vista.

Y es que aunque los cambios seguirán ahí y con mayor o peor fortuna habrá que ir encajándolos según sigan surgiendo, he decidido mirarlos de forma más acorde a su importancia.

Resumiendo, que más da lo que vaya cambiando si al fin y al cabo la vida es cambio. Todo se pone en su sitio, y ni sueños perturbadores con príncipes encantados, ni guerras antiguas que retornan del pasado, ni descubrimientos decepcionantes harán que se borre mi sonrisa, porque hay mucho, muchísimo por lo que sonreír a diario.

Feliz otoño navegantes.