No me llames.
Te he dicho
que no me llames.
Hace tiempo
que no tengo ningunas ganas de volver a ponerme en contacto contigo, de
mantener esta relación que no es amistad, ni amor, ni lujuria, ni deseo y en el
fondo es un poco de todo.
No tengo
ganas de sentirme obligada y deseosa de verte, de buscarte hueco y luego buscar
una excusa cuando la pereza me invada, o cuando los sentimientos encontrados que
tu presencia despierta me hagan arrepentirme de tenerte cerca.
No me
compensa el vaivén del instinto que me dice que te agarre para empujarte después.
Este ir y
venir de amor y asco.
Te he dicho
que no me llames… o quizá solo lo he pensado mientras sigo ignorando tu
existencia con la intención de mantener tu carta en la manga.
Nashaimm vs
Paz.
Si lo has disfrutado comparte.
Si lo has disfrutado comparte.
¡Cómo te entiendo, querida Paz! Bueno, a ti o a la protagonista de tu pieza, que no tienes que ser tú necesariamente. Y digo que os entiendo porque si algo tengo claro en esta vida es que debemos aprender a convivir con nuestras propias contradicciones. Yo aún estoy en ello. ; )
ResponderEliminarUn beso, Paz/Nashaimm.
P.D.: Algún día me tendrás que decir -si te apetece, claro- qué significado tiene ese nombre tan sugerente de Nashaimm. Me retrotrae a mis lecturas de "Las Mil y una noches", hace siglos de eso. : (
Gracias Pedro. Cierto, debemos aprender a vivir con ellas, aunque sospecho que es mas fácil para nosotros mismos que para los que nos rodean.
ResponderEliminarRespecto al nombre de mi alter ego, si, algún día te lo explicaré... ;-)